La tarea de un docente

 Por Arturo Arteaga

El dar a conocer y enseñar los contenidos del plan de estudios a los estudiantes es un mínima parte del quehacer docente, debemos despertar en cada alumno el interés por conocer su entorno, que sea un ciudadano activo, que busque siempre una mejora personal y no se conforme con la primera respuesta que encuentre

¿La tarea de un docente empieza y termina en el aula? Es una pregunta recurrente que nos hacen a quienes tenemos el privilegio de dedicarnos a la docencia. La respuesta la planteo de la siguiente manera: un docente con vocación es un maestro de tiempo completo, porque para muchos alumnos eres un ejemplo a seguir. 

El dar a conocer los contenidos del plan de estudios a los estudiantes es un mínima parte del quehacer docente, debemos despertar en cada alumno el interés por conocer su entorno, que sea un ciudadano activo, que busque siempre una mejora personal y no se conforme con la primera respuesta que encuentre.

Desde hace 8 años imparto clases en preparatoria y desde hace 3, en secundaria. Esta aventura la inicié en el Centro Educativo Josefina Chávez Sanjuán, donde con el apoyo de compañeros y directivos entendí la importancia de traducir el conocimiento del aula a la vida cotidiana.

El compromiso que tengo como docente lo refrendo al leer las inquietudes de una estudiante de la Secundaria Técnica 15, Paola Zavala, próxima a entrar a la preparatoria, quien aspira a formar parte de la Preparatoria Arkos. Lo siguiente es un fragmento de un artículo de opinión que escribió en la materia de Español:

“Me pongo a pensar acerca de dónde está el verdadero problema de mi país ¿Acaso será sólo culpa del gobierno? ¿De nosotros como ciudadanos? El futuro que nos espera cada vez es más incierto. No sé si podré llegar a tener una carrera profesional. Estoy consciente que para mejorar se debe trabajar en equipo y siendo honesta, es cuando lo veo más complicado, porque no hacemos mucho, no nos informamos, no valoramos la educación que estamos recibiendo. Ese es mi punto de vista de acuerdo a lo que veo en mi escuela con mis compañeros de clase. Hay mucha apatía, ignorancia y pereza.

Como jóvenes debemos demostrar mayor interés a lo que pasa a nuestro alrededor. Los valores sociales deben retomarse. Como alumnos debemos esforzarnos más, adquirir el hábito de la lectura, tener una mejor educación sexual para evitar cometer errores que truquen nuestros sueños. El país convulsiona y no podemos quedarnos de brazos cruzados. Debemos preguntarnos ¿Qué estamos dispuestos a hacer para mejorar mi futuro? ¿Qué puede esperar el país de nosotros? ¿Qué hábitos debemos cambiar? Los ciudadanos debemos levantar la voz y exigir un gobierno justo, es lo que merece nuestro país.” 

Y regresa la pregunta, ¿la tarea del maestro empieza y termina en el aula? Por supuesto que no. El compromiso que adquirimos quienes nos dedicamos a esto es complejo, pero es algo que no podemos dejar de hacer. Tanto en la Preparatoria Josefina Chávez como en su escuela hermana, la Universidad Arkos es un tema recurrente en la capacitación de sus docentes. No elijas una escuela, elige un proyecto educativo.