Por infinidad de compromisos que asumen en campaña, alcaldes incumplen reducción de nómina
A ocho meses de dejar sus cargos, los alcaldes de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá incumplen la promesa de reducir la plantilla laboral. Todos incrementaron las contrataciones y el gasto para las nóminas
A ocho meses de dejar sus cargos, los alcaldes de Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque y Tonalá incumplen la promesa de reducir la plantilla laboral. Todos incrementaron las contrataciones y el gasto para las nóminas.
Jorge Arana registra el mayor crecimiento en Tonalá: llegó en 2012 a la alcaldía con dos mil 76 empleados y en la primera quincena de enero de este año cerró con dos mil 683. El Ayuntamiento destaca porque se gobierna en familia: el munícipe aceptó en 2013 que tiene 50 parientes en la nómina.
Zapopan presumió un recorte de 700 burócratas al inicio de la administración, pero de contar con siete mil 643 empleados pasó en este año a ocho mil 218.
La contradicción es que si hoy pretende solicitar empleo en Guadalajara, Zapopan, Tlaquepaque o Tonalá mejor descarte la opción. “Ya no hay vacantes”, reportan las alcaldías.
Antonio Sánchez Bernal, académico de la UdeG, afirma que el crecimiento de las nóminas es imparable por la infinidad de compromisos que asumen en campaña los que llegan al poder.
Guadalajara, por su parte, arrastra con la plantilla más robusta. En salarios prevé gastar este año dos mil 826 millones de pesos. La reforma para reducir el gasto destinado a la nómina, que plantea el Plan Municipal de Desarrollo, quedó en el olvido.
El último corte arroja 11 mil 743 empleados tapatíos, 60 más que los heredados por la anterior administración. Lejos quedaron los tiempos (en 1990) en los que el municipio se daba abasto con siete mil empleados y el desembolso para sueldos representaba apenas 23% del total del presupuesto. Hoy absorbe 55 por ciento.
El director de Recursos Humanos de Guadalajara, Felipe López García, admite que este gasto no debería superar la mitad del presupuesto anual. ¿Cuántos trabajadores debería tener el Ayuntamiento para ese objetivo? Responde: “Ocho mil 500 exactamente”.
Tlaquepaque también creció su plantilla de cuatro mil 13 a cuatro mil 53 empleados.
El presidente de la Coparmex en Jalisco, José Medina Mora, lanza un llamado para utilizar responsablemente el presupuesto: “Gastarlo en la contratación de más personal va contra el servicio a los ciudadanos, el cual se deteriora porque el dinero se usa para el gasto corriente y disminuye la inversión”.
El otro problema es que las plantillas no están reguladas por la Ley del Servicio Civil de Carrera, creada desde 2007 en Jalisco. No existe una profesionalización de servidores públicos en beneficio de la población porque todos incumplen con el ordenamiento. (Con información de El Informador)
