Promociona IMSS Nayarit estilos de vida saludables para prevenir diabetes
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Nayarit, cuenta con programas de promoción y prevención para la atención de los pacientes con diabetes, denominados PrevenIMSS y DiabetIMSS, en donde se prioriza los estilos de vida saludable a través del plato del buen comer, evitar las grasas, los carbohidratos simples, los azúcares, las harinas y realizar ejercicio
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Nayarit, cuenta con programas de promoción y prevención para la atención de los pacientes con diabetes, denominados PrevenIMSS y DiabetIMSS, en donde se prioriza los estilos de vida saludable a través del plato del buen comer, evitar las grasas, los carbohidratos simples, los azúcares, las harinas y realizar ejercicio por lo menos tres veces por semana.
El jefe de medicina interna del Hospital General de Zona No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social en Nayarit (IMSS), Jorge Manuel Vera Peralta explicó que la diabetes es una enfermedad crónico degenerativa muy preocupante para los sistemas de salud. México ocupa el primer lugar en América Latina y décimo a nivel mundial en pacientes con este problema. Esta situación cobra relevancia a raíz de los cambios en los malos hábitos alimenticios que ha adquirido la población mexicana.
Señaló que a través de DiabetIMSS, al paciente diabético se les ofrecen pláticas, orientación, ejercicios especializados, a través del área de nutrición se les recomienda una dieta específica, balanceada, y con estas recomendaciones el médico conocedor de este tipo de pacientes les hace un plan para un mejor control de su enfermedad.
El especialista resaltó que en nuestro país se calcula que existen más de siete millones de diabéticos, lo que hace que el porcentaje vaya desde un 10 por ciento en lo general, hasta un 15 por ciento en los estados del norte, a causa de los malos hábitos alimenticios. En Nayarit, el porcentaje de pacientes con diabetes oscila entre las edades de entre 20 y 59 años de edad.
Vera Peralta indicó que la carga genética y los antecedentes de una mala alimentación hacen más propensa a la población a esta enfermedad. Así mismo, a los malos hábitos higiénico dietéticos se les suma la falta de ejercicio y el sedentarismo como predisponentes muy importantes de la diabetes.
El grupo de la mujer cuenta con mayor incidencia de diabéticas como pacientes, por lo tanto, los niños que nazcan tienen mayor probabilidad de desarrollar este padecimiento.
En este sentido, todo bebé que pese arriba de cuatro kilogramos al nacer, tendrá muchas posibilidades de heredar diabetes en comparación con otros niños que no superen los tres kilos 200 gramos.
Así mismo, todo paciente que tiene una carga genética, es decir si tiene familiares padres, abuelos o parientes cercanos con diabetes, eleva la posibilidad de padecer esta enfermedad. Y si mantiene los malos hábitos alimenticios y aunado a eso se le suman problemas de sobrepeso u obesidad, entonces la predisposición de padecer diabetes es casi segura.
Precisó que esta enfermedad es de dos tipos: la diabetes tipo 1 que representa un porcentaje más pequeño, sufren de trastornos en la producción de insulina, es decir aunque no tuvieran hábitos alimenticios deficientes, desarrollan la diabetes debido a ese trastorno; y la diabetes tipo 2, en donde se ubican a los niños de 8 a 10 años que nacieron con sobrepeso.
Es muy importante recalcar que el 90 por ciento de personas con este padecimientos se ubican dentro de la diabetes tipo 2, y sólo el 10 por ciento, aproximadamente, son del tipo 1, que no tienen nada que ver con los malos hábitos alimenticios, sino que se debe a una deficiencia genética del organismo que no produce insulina.
Lo que se pretende más que la esperanza, es la calidad de vida del paciente, porque al menos el 50 por ciento de los pacientes que no se cuidan adecuadamente la diabetes, van a llegar a la insuficiencia renal crónica. En consecuencia será atendido en el servicio de diálisis y hemodiálisis, que son complicaciones microvasculares.
Aparte, el paciente que no se controla está más propenso a infartos, tanto del corazón como eventos cerebrovasculares (con información de Realidades).
