Grupu civil "Bicicleta Blanca" se pronuncia a a favor de derechos de los ciclistas en Jalisco
Tras décadas de una planeación de infraestructura urbana orientada al tránsito automotor, ciclistas y peatones debemos de enfrentar; además de la falta de cultura vial por parte de automovilistas y conductores del transporte público, la casi total ausencia de vías seguras para el ciclista
El pasado 13 de marzo, en el cruce de la calle Azucena y avenida Revolución, un ciclista, se sumó a la larga lista de víctimas de una ciudad excluyente, tras perder la vida, cuando se incorporaba a la avenida Revolución la llanta de su bicicleta quedó atrapada en la apertura de una alcantarilla, ocasionando, inevitablemente, que cayera y quedara bajo las llantas del camión urbano de la ruta 178 de El Salto.
Tras décadas de una planeación de infraestructura urbana orientada al tránsito automotor, ciclistas y peatones debemos de enfrentar; además de la falta de cultura vial por parte de automovilistas y conductores del transporte público, la casi total ausencia de vías seguras para el ciclista; las múltiples trampas, algunas mortales, en que se pueden convertir baches, topes y sobre todo la inmensa mayoría de alcantarillas que fueron diseñadas pensando únicamente en vehículos motorizados y que podrían suponer responsabilidad por parte de la autoridad en el deceso mencionado y en cualquier otro caso futuro que las averiguaciones legales indiquen.
La muerte número 08 de ciclistas en lo que va de este año, podría tener como responsable al Sistema Intermunicipal para los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado, SIAPA, ya que es la infraestructura a su cargo la que cobra una víctima.
Es de sobra conocido el hecho de que bocas de tormenta y alcantarillas son una amenaza para tod@s los que circulamos en bicicleta por esta ciudad, la mayoría, tienen una apertura mayor al ancho de una llanta de bicicleta y además muchas se encuentran orientadas en el sentido de la circulación.
Un "accidente" como el del pasado 13 de marzo, queda fuera de las manos
de tod@s los que circulan en las calles. No hace diferencia si el o la ciclista era experimentad@, o si traía casco, o luces o chaleco fosforescente. Si el conductor del transporte público circuló a una velocidad prudente y cuidó su distancia o si respetó cruceros y señalamientos de tránsito. Al final del día, el ciclista puede encontrarse con una alcantarilla mal diseñada o deteriorada y perder la vida por la negligencia de un tercero.
Por todo lo descrito anteriormente, exigimos:
-La implementación inmediata de un programa orientado a la sustitución de alcantarillas que generan peligro para el tránsito de vehículos no motorizados, por otras que consideren un margen razonable de seguridad a los trayectos ciclistas.
-El reconocimiento público por parte del SIAPA de las responsabilidades que conlleva por omisión o negligencia en el diseño y edificación de infraestructura para alcantarillado de la ciudad.
- La implementación de un programa de atención a víctimas de la mala infraestructura de alcantarillado y apoyo a familiares.
