Permean las bajas ventas en la industria restaurantera de Tepic
Por espacio de tres años, ninguna empresa afiliada a la Canirac, ha podido acceder a los recursos del fondo Pyme, primero porque no había recursos y después por temor a fracasar dado las bajas ventas del sector
Al concluir el periodo vacacional de verano, los restauranteros de Tepic, hacen cuentas de las ganancias obtenidas durante esta época del año, y aunque hubo un repunte en las ventas, fue menor al registrado el año pasado en estas fechas. Y a este panorama desolador se suma los cobros exagerados del ayuntamiento por tiempos extraordinarios en la venta de bebidas alcohólicas hacia los establecimientos de comida y el acoso para renovar las licencias de funcionamiento, lamentaron empresarios.
Para este tiempo, había mayores expectativas, no fue lo esperado pero por lo menos no hubo pérdidas, afirmó el presidente de la Cámara de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (Canirac) de Tepic, Carlos García Jiménez, lo malo, dijo, es que vienen los dos meses más pesados del año, y comienzan a tambalearse los ánimos de los agremiados.
En el municipio los inversionistas dicen que el mejor negocio para invertir es la venta de alimentos, sin embargo "ya es cosa del pasado porque son muchos los establecimientos que han cerrado sus puertas, simplemente la semana pasada, cerró uno más, por las bajas ventas" señaló García Jiménez.
Y aunque existe financiamiento por parte de gobierno para ampliar o aperturar negocios con el giro de alimentos, nadie se quiere aventar, ni poner la soga al cuello, dada la situación, agregó.
Por espacio de tres años, ninguna empresa afiliada a la Canirac, ha podido acceder a los recursos del fondo Pyme, primero porque no había recursos y después por temor a fracasar dado las bajas ventas del sector, afirmó García Jiménez.
En ese sentido agremiados a Canirac lamentaron que el ayuntamiento, aseguran, aprieta a los negocios porque en estos días se vencen las prórrogas que hay para el pago de licencia de funcionamiento, o requerimientos para la renovación de las mismas y eso es motivo para que los fiscales visiten a los negocios con mayor continuidad hasta llegar al acoso a los mismos propietarios de los negocios.
Y aunque no se niegan a pagar, los integrantes del sector piden plazos para el pago de licencia y una disminución a las millonadas que cobran por tiempos extraordinarios, finalizó el dirigente de los restauranteros. Con información de Realidades.
